La lucha contra el COVID-19 en Estados Unidos está tomando un nuevo giro con el acceso a las vacunas para muchos turistas que entran al país. Estados como Texas, Florida, Luisiana y Arizona no están exigiendo una prueba de residencia para recibir una vacuna contra el COVID-19, e incluso están estimulando a todas las personas, sin distinciones, a que vayan a vacunarse. La ciudad de Nueva York también está ofreciendo la vacuna de una dosis de Johnson & Johnson para los turistas visitantes de sus atracciones y espacios más emblemáticos. Esto en parte es el resultado del avance de las vacunaciones en el país, donde según datos del gobierno más del 53% de la población ya ha recibido al menos una dosis. En América Latina, la mayoría de los países apenas han logrado inmunizar a una parte importante de la población. Y precisamente desde América Latina están llegando la mayoría de los turistas que buscan vacunarse. Agencias de viajes en México y Colombia, por ejemplo, promocionan paquetes turísticos que hacen énfasis en el acceso a la vacuna en Estados Unidos. Las autoridades de muchos de estos estados se han percatado que ofrecer acceso a la vacuna para los visitantes puede ayudar en la recuperación de la caída que sufrió el turismo durante los peores meses de la pandemia. Recibir la vacuna sin la necesidad de proveer prueba de residencia es un esfuerzo para que los inmigrantes indocumentados en EE. UU. tengan acceso a la vacuna.